Tras gastarnos 1.300€ en el que será nuestro futuro PC, un paso muy habitual es el de hacerle fotografías para que todo el mundo sea partícipe de nuestra reciente adquisición. Sin embargo, en ocasiones esas imágenes no hacen justicia al dispositivo. Hacer fotos de gadgets puede parecer algo fácil, pero a veces se convierte en una ardua tarea.
Son muchos los gadgets que admiramos por su diseño. Ya sea un televisor o un ratón de ordenador, todos ellos poseen una línea estilística que nos puede hacer amarlo, no solo por su interior, sino también por su exterior. Precisamente esa belleza es la que pretendemos captar cuando realizamos una fotografía, aunque en ocasiones los resultados no son tan positivos como podríamos desear.
Hablar de “gadgets” puede ser algo genérico, ya que con ese término podemos abarcar desde un PC hasta un smartwatch, dos tipos de dispositivos muy diferentes que, como consecuencia de ello, también requerirán una distinta forma para ser fotografiados. Sin embargo, creo que existen una serie de conceptos comunes a tener en cuenta para conseguir mejores fotos de gadgets.
Cámara
Lo primero es decidir qué cámara vamos a utilizar. Realmente, la mayoría de ocasiones estamos interesados en hacer una fotografía para compartir esa imagen al instante, por lo que quizá el smartphone sea la herramienta más adecuada para ello. Sin embargo, si tenemos una compacta u otra cámara más avanzada podríamos asegurarnos aún más que la fotografía resultante será adecuada. En función de la opción elegida, debemos tener varias cosas en cuenta.
Smartphone: si nuestro móvil tiene exposición puntual, lo ideal es que lo tomemos en una zona intermedia, donde las luces o sombras no sean extremas. Asimismo, el modo HDR puede ayudarnos a reducir esa diferencia y aumentar el rango dinámico de la imagen, lo cual es de gran ayuda si, por ejemplo, deseamos fotografiar la un PC de sobremesa que tiene la pantalla encendida.
Cámara avanzada: ya sea una compacta, mirrorless o réflex, si optamos por este método seguramente estaremos pensando en fotografiar nuestro producto de la mejor forma posible. Los controles manuales nos serán de gran ayuda, ya que así podremos elegir exactamente la cantidad de luz que queremos. Cuando fotografiamos una serie de objetos no es recomendado utilizar un diafragma muy abierto, ya que la profundidad de campo sería muy pequeña. No obstante, si lo que vamos a captar es un único elemento, las grandes aperturas nos otorgan un bonito desenfoque que ayudan a centrar la atención en el objeto principal. Por otro lado, como es de imaginar, lo preferible es usar el valor mínimo de ISO disponible, aunque dependiendo de la luz en la escena eso puede resultar imposible.
Luz
Muchas fotos de gagets están tomadas en el interior de una casa, lo que también puede repercutir de forma negativa o positiva en la iluminación de ésta. La luz es esencial para una fotografía, y si la claridad en nuestra habitación no es bienvenida, tampoco lo será para tomar una buena imagen. Todo va a depender de la iluminación que tengamos, pero también podemos intentar arrojar algo más de luz empleando algunas técnicas.
Luz natural: de verdad, puede parecer estúpido, pero en ocasiones podemos olvidar que tenemos una vía de comunicación con el exterior también apta para dejar pasar la luz solar. Subir la persiana es una opción tan básica que en ocasiones ni apreciamos, y sin embargo creo que puede ser de las mejores. La luz natural, al contrario que ocurre con la artificial, no suele ser tan dura y directa, algo que afecta de forma positiva a las imágenes.
Lámpara: a veces no existe otro remedio y debemos recurrir a la luz artificial. No obstante, el ángulo de donde procede la luz definirá cómo se realza el contorno del objeto que vamos a fotografiar. Por ello, la lámpara del techo suele generar unas sombras que no son demasiado agradables. Quizá lo recomendable sea emplear una pequeña cámara y rebotarla en alguna pared para así generar una luz suave, que no incida directamente sobre el objeto y evite crear sombras indeseadas.
No obstante, si nuestro gadget puede ser sacado al exterior (es decir, si es un smartphone o un reloj y no un PC de sobremesa), entonces podemos aprovechar las mejores horas de luz para hacer fotos.
Encuadre
El encuadre se va a encontrar definido por el entorno en el que nos situemos. Obviamente, no es lo mismo captar imágenes una habitación que en el exterior. Nuestra labor es la de preparar ese escenario para que sea lo más propicio posible. Es decir, en definitiva lo que estamos haciendo es un bodegón, donde lo que importa es la apariencia de los objetos representados y el nivel estético que definen sus formas.
El entorno es de gran importancia cuando captamos imágenes generales. Por lo tanto, debemos adecuarlo para que luzca de la mejor forma posible. Por ejemplo, si vamos a fotografiar nuestro PC de sobremesa, también podemos aprovechar para colocar elementos a su alrededor (figuras, plantas, otros gadgets… etc.) para que nos ayuden a crear esa estética. Eso sí, el objeto a fotografiar nunca debe dejar de ser el protagonista y por ello tenemos que utilizar de forma inteligente la regla de los tercios para situarlo en la zona con más interés.
Sin embargo, muchas fotos de gadgets suelen centrarse en planos generales para mostrar lo máximo posible del objeto. Pero, ¿por qué no probar con un plano detalle? No necesitamos ver un smartphone al completo para realizar una foto estética, es más, muchas de las más cuidadas solo enseñan una parte del dispositivo. Si esos planos cercanos los combinamos con una gran apertura de diafragma, entonces podríamos obtener grandes resultados.