Párate un momento a pensar el número de series de televisión que ves al año y calcula cuánto tiempo inviertes aproximadamente en ver a tus protagonistas favoritos (puedes usar esta web para ayudarte con las horas exactas). Bien, ahora intenta incluir en la fórmula el tiempo que pasas viendo comerciales o anuncios de cualquier tipo.
Desde Exstreamist y con ayuda de datos de la firma analista The Difussion Group (TDG) nos ahorran gran parte del trabajo que proponíamos en el párrafo anterior y desgranan algunos datos de consumo de contenidos que tienen los suscriptores en Netflix, que nos ayudan a entender por qué el servicio de streaming a la carta no para de crecer.
La media de tiempo que están invirtiendo los suscriptores de Netflix viendo contenidos cada día es de 1,5 horas, mientras que por cada hora de televisión emitida en todo el mundo hay unos 15 minutos y 30 segundos de publicidad. Haciendo cuentas, Netflix nos 'ahorra' al año 130 horas de anuncios, que son unos cinco días y medio o 65 películas.
Teniendo en cuenta que las cadenas de televisión están aumentando la frecuencia de publicidad a ritmos de entre un 20 y un 25% en los últimos cinco años (con el respectivo aumento de ingresos que conlleva), parece claro por qué el público se está decantando por la comodidad de elegir qué ver y cuándo sin que haya un carrusel publicitario molesto antes, durante y después de la serie o película que te tiene enganchado.
Pero la comodidad de no tener que ver anuncios no es el único motivo de éxito de Netflix. La apuesta por el contenido propio y de calidad, una inversión que está haciendo de manera inteligente a medida que crece, está repercutiendo en un servicio en el que, aparte de tener la libertad de ver lo que quieras y cuando quieras, tienes producciones exclusivas como Daredevil, House Of Cards, Orange Is The New Black o Club de Cuervos (la primera que presenta en español).
Hay que reconocer que hubo pánico cuando unos rumores apuntaban la posibilidad de que Netflix incorporase anuncios propios, aunque el CEO del servicio, Reed Hastings, aclaró pronto que no iba a ser así. Eso sí, hace unas semanas vimos que Netflix comenzaba a experimentar con comerciales que trataban sobre sus propias series dentro del servicio. "No son anuncios en el sentido estricto de la palabra", dicen ellos, pero, como siempre, será una cuestión que acabe juzgando esa persona que gasta entre 6 y 10 dólares para librarse de la publicidad de la televisión convencional.