Hemos tenido la oportunidad de visitar la fábrica de Ford en Colonia (Alemania), lugar en el que la compañía fabrica sus motores EcoBoost 1.0 y el Ford Fiesta, y donde pudimos ver de primera mano el proceso de fabricación de ambos productos o comprobar el nivel de exigencia y calidad al que Ford somete a cada vehículo antes de que ni siquiera pise la calle de la fábrica.
En ese sentido, la fábrica de Colonia es una de las más importantes de Europa, y en la que solo en 2013 Ford fabricó más de 190.000 motores EcoBoost, un número muy elevado si tenemos en cuenta que cada motor sigue un proceso de fabricación mixto en el que se unen procesos automatizados y manuales por personal cualificado. Es decir, no se trata de un procedimiento automático en el que una cadena de producción fabrica un motor de forma automática, si no que se monta a mano el motor de tres cilindros con los pistones, las bielas y el cigüeñal, para luego añadirle el resto de componentes de forma automática.
Después, el resto del proceso es automático, en el que un robot guiado por un láser une la culata y el tubo de escape, para más tarde añadir el volante de inercia , la polea, y el sistema de inyección. Un proceso en el que se van integrando las más 220 piezas que contiene cada motor: pernos, sistemas de arranque, presión de aceite, componentes eléctricos... todo se prueba en frío en la línea de montaje, lo que permite reducir el impacto ambiental y que la línea de montaje sea más eficiente.
No obstante, siguiendo los controles de calidad, los motores también se someten a prueban con combustible, todo con la intención de poner a prueba a cada uno de los elementos, y que sean parte de un sistema de control de calidad de alta eficiencia para que pasen todas las exigencias del fabricante. Nada se deja nada al azar, y se controlan las posibles fugas de fluidos a través de luz ultravioleta. Además, cada motor se arranca antes de que monte en el coche para comprobar que su funcionamiento es óptimo y, se somete a una auditoría completa pieza a pieza de cada motor número 5000 para comprobar que todo esté en orden.
Todos los detalles se cuidan al máximo, para pasar el siguiente nivel, en el que motor se monta en el Ford Fiesta, que también se ensambla desde cero en la planta de Colonia.
Si cada motor Ecoboost se componen de 220 piezas, el Ford Fiesta que lo lleva en su interior eleva esta cifra hasta las 4.500 piezas. Su proceso de producción empieza con presas gigantes de 2.000 toneladas que troquelan cada uno de los 310 paneles de acero que componen el Fiesta, para coger el relevo los más de 1.000 robots guiados por láser que los unen y sueldan para formar un caparazón completo que ya tiene forma de vehículo.
Pintura, barniz y productos para proteger la carrocería de la corrosión son el siguiente paso en esta cadena de montaje en la que todo está medido al milímetro. Se continua con el proceso de montaje en el que armazón, motor y transmisión se unen a los 1,2 kilómetros de cable y a los acabados interiores -que pueden variar en 15 acabados diferentes, a petición del cliente-. Se inserta el panel de instrumentos, las ventanillas y los asientos y las puertas, y, a falta de ruedas, el Ford Fiesta está casi terminado.
Lo interesante viene después, y es que cada Ford Fiesta que sale de la cadena de producción se somete a más pruebas de control de calidad para asegurar que todo esté correctamente y funcione como tiene que hacerlo: una prueba en una cinta de alta velocidad, que opera a velocidades de hasta 120 km/h para comprobar el motor, el cambio, los frenos y la alineación de las ruedas; una inspección ocular con luz de alta intensidad del interior y exterior y una serie de láseres que miden el ajuste de las puertas, capó y portón trasero.
Se examina la pintura y se utiliza un “lavadero” equipado con chorros de agua de alta presión para comprobar que las puertas y ventanas están perfectamente selladas: un tormenta perfecta por la que cada Fiesta tiene que pasar. Finalmente, cada Fiesta atraviesa un circuito especial de 300 metros con todo tipo de superficies para poner a prueba e resto de detalles:
Además, cada día se seleccionan 20 Fiesta al azar para ser sometidos a controles aleatorios aún más intensos: otra prueba de sellado de las juntas, una prueba de conducción en vía pública y autopista para poner a prueba el coche en condiciones reales.