Ayer Instagram hizo un movimiento muy estudiado añadiendo la posibilidad de compartir video desde su plataforma. Es claramente un ataque directo a Vine, la plataforma más famosa para compartir pequeños videos. Realmente esta "guerra" va más allá, ya que Vine pertenece a Twitter e Instagram a Facebook, así que es un combate más amplio. Ahora que las dos plataformas ofrecen la misma opción, es hora de hacer una comparativa entre Instagram y Vine.
Grabar
Una de las principales diferencias es la longitud del video. Instagram permite grabar 16 segundos mientras que Vine soporta poco más de 6 segundos. Personalmente me gusta la frescura de Vine, quizás 16 segundos son un disfrute para el que graba el video pero demasiados para la persona que lo mira (sobre todo enfocado a una plataforma móvil). En los dos programas puedes ir grabando pequeños clips separados que acaban haciendo un collage de video. Instagram permite borrar el último clip, muy cómodo, si por ejemplo estás intentando hacer un video en diferentes localizaciones y te equivocas en el último, pero creo que a la vez esto le añade más valor a los videos de Vine.
Lo que no permite ninguno de los dos programas es que añadas los videos que tienes guardados en tu móvil, el video tiene que ser grabado desde la propia aplicación: inmediatez. Tanto Vine como Instagram ofrecen la opción de usar la cámara frontal y trasera, pudiendo intercambiarlas entre cada clip.
Si por algo es reconocida Instagram es por sus filtros, y han implementado esta opción a los videos también. Existen 13 filtros, diseñados específicamente para video, entre los cuales puedes elegir. Vine no ofrece esta característica y no existe ningún rumor acerca de que vayan a añadirla. Para mi el punto fuerte de Vine es el resultado final: pequeñas obras de arte en loop. Creo que deberían añadir herramientas más sofisticadas que filtros de imagen (como por ejemplo poder insertar varias pistas de audio, etc.), aunque si me dejaran elegir, pediría poder exportar el video como un ".GIF".
Otra diferencia es la función que Instagram ofrece para estabilizar los vídeos, aunque al igual que los filtros, hace que el video pierda calidad de imagen. De todos modos, la estética del clip en determinadas ocasiones es más importante que la calidad en sí, sobre todo, si se va a consumir en un dispositivo móvil.
A la hora de compartir los videos creados, Instagram ofrece muchas más conexiones con otros servicios. Mientras Vine permite compartir a Facebook y Twitter, Instagram te da la posibilidad de compartirlos en Facebook, Foursquare, Twitter, Tumblr y Flickr. De todos modos, en esta guerra encubierta de Facebook-Twitter, Vine es compatible con las famosas "tarjetas" que se muestran en Twitter, función que Instagram tiene no tiene desde hace tiempo.
Reproducción
Tanto Vine como Instagram reproducen automáticamente los videos, aunque Instagram tiene un buffer de 2 segundos para ofrecer la posibilidad de pausarlo. Vine es más directo, abres la aplicación y los videos instantáneamente se empiezan a reproducir. Aunque para mi la principal diferencia entre las dos plataformas es el efecto loop que ofrece Vine, esto hace que parezca más un ".GIF", y que a veces te quedes medio hipnotizado viendo un video como si fuera un efecto óptico. No me extrañaría que con el tiempo Instagram ofrezca esta posibilidad, ya que al ser la principal peculiaridad de Vine, supongo que le habría acarreado muchas críticas ofrecerlo desde el principio.
Conclusión
Instagram tiene una comunidad de usuarios muy grande y más antigüedad, por lo que no tendrá que hacer nada para que sus usuarios empiecen a compartir videos. La propuesta de Vine es más simple y minimalista, creo que los videos de Instagram serán clips creados para las masas, mientras que Vine seguirá siendo el lugar para pequeñas obras de arte audiovisuales, que apuestan por la frescura y un efecto ".GIF". De todos modos tendremos que esperar a la respuesta de Vine, que no tardará mucho en llegar. Hace días que llevan anunciando que han renovado la interfaz y que añadirán más opciones.