Vaya malas pulgas ha resultado tener Paul Allen, el histórico cofundador, junto a Bill Gates de Microsoft. Desde que abandonase la compañía la verdad es que no le ha ido nada mal, en Marzo Forbes estimó su fortuna en 13 mil millones y medio de dólares, ahí es nada, y sin embargo así de repente se ha sacado de la manga una demanda por violación de patentes contra Apple, Google, AOL, eBay, Netflix, Facebook, Yahoo y alguna que otras más, lo que viene siendo todo el mundo.
¿Todo el mundo? Bueno, todo el mundo no, en esa lista de gigantes de Silicon Valley faltan Microsoft, ironías de la vida, y Amazon, de la que el señor Allen, mira tú por donde, es inversor. Lo que todas estas compañías han hecho supuestamente para enfadar tanto a este señor es violar una serie de patentes, o eso dice él, que Allen desarrolló en la década de los 90 con todo el boom de las puntocom y que resultan esenciales para todas las operaciones que llevan a cabo en la actualidad.
No es que Paul Allen inventase lo que defienden las patentes, relacionadas con el comercio a través de internet, simplemente es poseedor de las mismas, otro detalle importante. Básicamente se refieren a todo el proceso de sugerencia de productos en base a lo que estemos buscando y/o comprando, como las sugerencias de Genius en la App Store. Llama la atención que este sistema de sugerencias es básicamente uno de los pilares de Amazon (que tiene un algoritmo de recomendaciones fabuloso) y sin embargo esta no ha sido demandada.
Con la cantidad de dinero que tiene este señor, y con todo el respeto que se merece por haber jugado un papel decisivo en la historia y desarrollo de la tecnología, todavía no me entra en la cabeza como ha podido lanzar una demanda por algo tan obvio, tan ubicuo y tan común que dudo que tenga validez alguna en los juzgados, aunque vete tú a saber. Es como si alguien patenta el clic del ratón y viene ahora a pedirte remuneración y derechos propiedad intelectual. ¿Llegará a algún lado esta demanda? No soy un experto en economía ni leyes estadounidense, así que sinceramente no lo sé, la cosa desde luego no tiene mucho sentido.
Para mí lo importante son las palabras de un representante de Google: 'Esto refleja la desafortunada tendencia de algunos a competir contra algunas de las compañías más innovadoras de América en un juzgado en vez de hacerlo con las reglas de libre mercado'. Ineptitud y mucha cara dura es lo que me parece a mí que hay detrás de esto.
Via: Wall Street Journal